Pájaro inmenso y triste
de alas tornasoladas,
ebrio no de licores
pero sí de los zumos
de todas las delicias
que exprime la locura
que a poco se convierte
en espiral de humo.
Ha cruzado la esfera
de espacios intangibles
trayendo entre sus picos
pedazos de luceros
y acaso en sus pupilas
chispas de lejanías
y ensueños imposibles.
Pájaro inmenso y triste
de alas tornasoladas
que hoy cansado y herido
aletea en mi pecho
buscando inútilmente
su penumbra de olvido.